Nutrición en Crecimiento del Cannabis

Cómo Optimizar la Nutrición en Crecimiento del Cannabis
La nutrición en crecimiento del cannabis es fundamental para un desarrollo saludable durante la fase vegetativa. En esta etapa, las plantas están en pleno crecimiento estructural, priorizando el desarrollo de raíces profundas, tallos robustos y un follaje denso que maximizará la fotosíntesis en la fase de floración.
Este proceso depende de una fertilización equilibrada, un manejo adecuado del pH y el control de la temperatura ideal tanto durante el día como en la noche. Mantener estas condiciones asegura un crecimiento óptimo y prepara la planta para una floración abundante.
Los macronutrientes, especialmente el nitrógeno (N), son esenciales en esta fase. El nitrógeno promueve la formación de clorofila y proteínas que fortalecen las células vegetales. El fósforo (P) impulsa el desarrollo radicular y el almacenamiento de energía, mientras que el potasio (K) regula procesos clave como la transpiración y la resistencia al estrés ambiental.
Además de controlar el pH y la temperatura, es fundamental prestar atención al Déficit de Presión de Vapor (VPD). Este parámetro mide el equilibrio entre temperatura y humedad relativa, lo que influye directamente en la transpiración de las plantas y la eficiencia en la absorción de nutrientes.
Mantener un VPD adecuado (entre 0.8 y 1.2 kPa en esta fase) es clave para un desarrollo vigoroso y saludable.
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Etapas de la Nutrición en Crecimiento del Cannabis
Primera Semana: Etapa Inicial
Durante la etapa inicial, el desarrollo radicular en cannabis es prioritario. Esto establece la base para un crecimiento robusto y un follaje sano. En este periodo, el pH debe mantenerse en el rango superior del intervalo recomendado (6.0-6.1 en tierra y 5.6-5.8 en hidroponía).
Será especialmente importante no agregar ningún nutriente mas allá de un buen enraizante en los primeros días de vida.
- Objetivo: Establecer raíces fuertes y un sistema foliar básico.
- Nutrientes: Usa estimuladores de raíces, evitando fertilizantes hasta el segundo nudo.
- Riego: Mantén el sustrato húmedo pero no saturado.
- Temperatura: 24-26°C durante el día y no menos de 18°C por la noche.
- Humedad relativa: 65-75% para proteger las plantas jóvenes.
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Etapa Intermedia: Crecimiento Activo
En la etapa intermedia, el crecimiento foliar y el fortalecimiento de los tallos son los objetivos principales. Este es el momento ideal para introducir fertilización NPK cannabis con una proporción 2-1-2 o 3-1-2, ajustando las dosis según el desarrollo de las plantas.
- Objetivo: Aumentar el volumen foliar y fortalecer tallos.
- Nutrientes: Fertilizantes suaves y progresivos con nitrógeno como base.
- Riego: Incrementa ligeramente la cantidad y frecuencia.
- Temperatura: 22-26°C durante el día y 18-20°C por la noche.
Pre-floración: Preparación para el Estiramiento
En la pre-floración, las plantas están casi listas para la transición a la floración. Es crucial ajustar la nutrición, bajando el nitrógeno y aumentando el fósforo y potasio (NPK 3-4-5). Mantén el pH en rangos óptimos (6.0 en tierra y 5.5-5.8 en hidroponía).

- Objetivo: Completar el crecimiento vegetativo y preparar la transición a floración.
- Riego: Ajusta según el tamaño de la planta, evitando el exceso de agua.
- Temperatura: 22-24°C durante el día y 18°C por la noche.
- Consejo: Realiza podas ligeras para mejorar la circulación de aire y eliminar hojas bajas innecesarias.
Conclusión
Optimizar la nutrición en crecimiento del cannabis durante la fase vegetativa garantiza un desarrollo estructural sólido. Al mantener niveles adecuados de pH, temperaturas ideales y una nutrición equilibrada, puedes maximizar el potencial de tus plantas. Consulta nuestra guía detallada o consultanos a través de nuestro formulario de contacto para para más información.
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